Una canción y un encuentro [Libre]

La jornada había sido larga, dura y cansada. Alice había salido desdé muy temprano en la mañana a repartir las ordenes de víveres y demás suplementos que habían hecho a su almacén, esta ocasión entregaría en el Reino Blanco.

Si bien miles de millones de años atrás el transportarse entre reinos era algo simplemente impensable, quien pasará por los reinos debería pensar mucho en su cuartada para que le dejaran salir, de lo contrario quedaría estancado en el reino por mucho, mucho tiempo. Ahora era algo común, comerciantes iban y venían a través de los reinos sin peligro alguno, por eso aunque Alice era una poderosa y reconocida Wicca no tendría problema alguno al cruzar el reino blanco.

Así sus diligencias empezaron desde temprano, entregando en las tiendas que así lo solicitaron, no solo los víveres sino también sus poderosas posimas.
El tiempo paso rápido y para cuando termino su ultima diligencia era ya bastante tarde para emprender el camino de vuelta a su caso, y sobre todo cansada por lo cual decidió permanecer en un hotel de la zona, algo hambrienta decidió salir a comer algo por la ciudad, después de todo pocas veces tenía la oportunidad de vagar libremente por ahí.
justamente iba paseando por las tranquilas calles del reino cuando se topo a una chica de larga y lisa cabellera negra, parecía aterrada, molesta... confundida.

Con mucha cautela se acerco poco a poco a la chica hasta que ella se volteo
H...hola ¿chica, estas bien?

La joven que estaba frente a ella simplemente asintió , parecia que se enconraba bien y para ahora seguia su camino como si nada. Esa era una acción normal, para cualquier persona, asi que por igual Alice siguio su camino, que curiosamente era por donde la joven de azabaches hebras avanzaba, parecía que irian a donde mismo, ya era hora de la cena.

Algo que caracterizaba a ese pueblo era la facilidad con que cambiaban sus calles, de las calles de una lujosa ciudad pavimentada, a extensos campos delimitados por minimos caminitos, Alice estaba completamente acostumbrada a eso pero parecia que la forastera no, ya que tan pronto vio las praderas como rayo se dejo salir hacia ellas eso impresiono un poco a Alice, pero como si nada siguio su camino hasta escuchar la voz de la chica, acción que la confundió un poco
a..a... p..pues no gracias, e..estaba en camino a cenar...¿deseas venir? no sabia porque la había invitado, la naturaleza de Alice era desconfiada pero en esa ocasión solo se dejo llevar.